Ronin
3 Comentarios Publicado por Kurakensama's External Plugin :: lunes, noviembre 12, 2007 :: 10:27 p.m..
Desde que entré a trabajar a Sixlabs, la mayoría de las cosas han sido francamente buenas. Desde un tremendo ambiente, buenos compañeros, problemas estimulantes y mucho, mucho café gratis. Pero claro, hay esquinas oscuras que empañan buena parte de todo.
No puedo practicar kung fú.
5 palabritas que expresan desesperación. NO PUEDO PRACTICAR KUNG FU. Por primera vez en mi vida tengo un horario de oficina, y como siempre supe que pasaría eso significa que NO PUEDO PRACTICAR KUNG FU. Me duelen las piernas de estar sentado y tengo los bíceps blandos. Me duele la espalda porque NO PUEDO PRACTICAR KUNG FU.
Buscando soluciones, me puse de acuerdo con mi amigo Pelado, que está en las mismas que yo pero peor, porque hace más tiempo que yo que no practica. Y quedamos en que nos podemos juntar, que se yo, a partir de diciembre... prácticamente el próximo siglo. Por mientras, mi duramente ganada musculatura se va y deja paso a mi fácilmente adquirida ponchera. Me puse a hacer tai chi en el parque Juan XIII y terminé pal gato. Es el colmo.
Finalmente, siguiendo el instinto y tras un poco de lectura en la red, llegué a clases de Hapkido. Resultó ser un arte marcial fino y que mezcla una serie de cosas que, si bien no son mis favoritas, necesito mejorar(*). Tiene el delicado juego de manos del Xi Na y el Tuei So, pero combinado de manera vigorosa con piernas ágiles. Hay mucho del judo escolar también. Hasta el momento no he visto golpes, pero sé que hay. Y tanta cosa me volvió a un mar de recuerdos, a cuando enseñaba tai chi en las mañanas, a las ceremonias y las caídas del judo. Pero sobre todo, me recordó las duras, fuertes y profundas lecciones de mi profesor, Sifú Jaime(**). Me acordé de todas esas risas y conversaciones, golpes, carretes, cervezas e historias que pasamos. Y me sentí solo; un ronin suelto en el mundo, tratando de allegarse a otro maestro. Me sentí asqueroso. Me dí y me dió pena.
Y bueno, en uno y otro momento todo Chung Iy Tang debe abrir las alas y volar. A pesar de la mezcla de sentimientos, debo seguir fiel a mi camino. Si éste tien Hapkido por delante, Hapkido aprenderé, y les enseñaré a mis queridos chung iy tan-es técnicas que olvidé hace años y que empiezo a recordar en nuevas variantes. Espero volver a mi escuela de kung fu, a hacer y tomar clases. Sé que así será.
Pero por ahora, sólo soy un ronin.
________________________
(*): Cuando llegué, le dije al profesor que yo era instructor de kung fu; no me pescó demasiado (comprensible). Le pegué a casi todos los nuevos. Sin querer, claro. Me tuvo que pasar al grupo de avanzados XD.
(**): No le gusta que le digan sifú, pero bueno, yo le digo como se me antoje.
No puedo practicar kung fú.
5 palabritas que expresan desesperación. NO PUEDO PRACTICAR KUNG FU. Por primera vez en mi vida tengo un horario de oficina, y como siempre supe que pasaría eso significa que NO PUEDO PRACTICAR KUNG FU. Me duelen las piernas de estar sentado y tengo los bíceps blandos. Me duele la espalda porque NO PUEDO PRACTICAR KUNG FU.
Buscando soluciones, me puse de acuerdo con mi amigo Pelado, que está en las mismas que yo pero peor, porque hace más tiempo que yo que no practica. Y quedamos en que nos podemos juntar, que se yo, a partir de diciembre... prácticamente el próximo siglo. Por mientras, mi duramente ganada musculatura se va y deja paso a mi fácilmente adquirida ponchera. Me puse a hacer tai chi en el parque Juan XIII y terminé pal gato. Es el colmo.
Finalmente, siguiendo el instinto y tras un poco de lectura en la red, llegué a clases de Hapkido. Resultó ser un arte marcial fino y que mezcla una serie de cosas que, si bien no son mis favoritas, necesito mejorar(*). Tiene el delicado juego de manos del Xi Na y el Tuei So, pero combinado de manera vigorosa con piernas ágiles. Hay mucho del judo escolar también. Hasta el momento no he visto golpes, pero sé que hay. Y tanta cosa me volvió a un mar de recuerdos, a cuando enseñaba tai chi en las mañanas, a las ceremonias y las caídas del judo. Pero sobre todo, me recordó las duras, fuertes y profundas lecciones de mi profesor, Sifú Jaime(**). Me acordé de todas esas risas y conversaciones, golpes, carretes, cervezas e historias que pasamos. Y me sentí solo; un ronin suelto en el mundo, tratando de allegarse a otro maestro. Me sentí asqueroso. Me dí y me dió pena.
Y bueno, en uno y otro momento todo Chung Iy Tang debe abrir las alas y volar. A pesar de la mezcla de sentimientos, debo seguir fiel a mi camino. Si éste tien Hapkido por delante, Hapkido aprenderé, y les enseñaré a mis queridos chung iy tan-es técnicas que olvidé hace años y que empiezo a recordar en nuevas variantes. Espero volver a mi escuela de kung fu, a hacer y tomar clases. Sé que así será.
Pero por ahora, sólo soy un ronin.
________________________
(*): Cuando llegué, le dije al profesor que yo era instructor de kung fu; no me pescó demasiado (comprensible). Le pegué a casi todos los nuevos. Sin querer, claro. Me tuvo que pasar al grupo de avanzados XD.
(**): No le gusta que le digan sifú, pero bueno, yo le digo como se me antoje.
Ojala te vaya bien... :D
estimado
no eres un ronin...
al contrario, ahora debes ceñirte a un horario, no puedes hacer lo que quieres...
no eres un ronin, eres un samurai con obligaciones.
ya dejamos de ser ronin hace mucho, donde nuestra principal norma y regla era solo nuestra conciencia, hoy que tenemos mas alcence de cosas tenemos menos tiempo para disfrutarlas...
recuerda que hace unos dias estuve a punto de cometer seppuku laboral, pero me fue negado, eso es algo que nunca haria si no tuviera que responderle a alguien de mis acciones.
mientras, practico karate, lo unico que hoy hago por diversion.
Hay cosas peores
al menos a Kun Fu puedes volver algun dia coordinandote y coordinando los horarios de algun otro amigo
hay cosas que ya se te paso el tiempo y por mucho que quieras no podras recuperar
viejamente
YO