=]<5=

Pancho tomó su silla y se dejó caer sedentariamente encima. Dejó su maletín en el mesón y miró a Luis ansiosamente.

- Y sí, escribí el algoritmo que te decía, y encontré que aplicando matemática social a varios libros como la Biblia, el Corán, el Señor de los Anillos, siempre se obtenía la misma respuesta: 42
- Ya... y suponiendo que eso es verdad, entonces estos libros contienen una clave. Un mensaje de Dios, ¿no?. - la mirada de Luis se perdía entre el aburrimiento y las luces de la sala.
- Si, como el Dia de la Bestia, de Alex de la Iglesia, ¿la viste?. Bueno, no importa. El asunto es que la parte interesante no es esa. El asunto, lo importante es que tomando algunos algoritmos de ingeniería social inversa, homogeneizando las variables y reescribiendo los libros en C, obtuve programas ejecutables.
- ¿Reescribiste la Biblia en C? De verdad, tú tienes problemas, y yo tengo que ir a trabajar. Consíguete una mina y deja de webear.

Luis empezó a caminar hacia su cubículo. Pancho lo siguió apresuradamente, balanceando sus kilos con su maletín.

- Oye, de verdad esto me resultó. Tuve al pc funcionando como dos semanas y ayer terminó el programa. Te lo muestro.

Luis lo miró sospechosamente.

- Me estás diciendo que descubriste tú solito el significado de la vida.
- Sí.
- A ver, muéstrame ese programa.

Y cuando Pancho sacó su notebook del maletín, una muchacha corrió al teléfono y aparecieron en el cielo inmensas naves amarillas.

Etiquetas: Homenaje a Douglas Adams