=]<5=

Muchas veces dije, preparándome ante el inevitable declive de mi querido Beowulf (Compaq Presario M2217LA con 1Gb RAM), que mi próxima máquina de trabajo iba a ser un MacBook. Y llegó el día aquel, en que mi fiel notebook amaneció con la pantalla rota; ese día, sin preparación ni anestesia mediante, hube de partir a buscarle un reemplazo. Busqué un Mac que me cobijara por todas partes, pero dado que no me fue posible elegir la fecha de llegada del MacBook, el día de la compra de la nueva máquina llegó en medio de una sequía de productos Apple. El más barato era indecentemente básico y el siguiente en la lista era indecentemente caro. Obligado, entonces, a caer en Redmond de nuevo (dado que, como mis amigos saben, el pingüino y yo no somos amigos); obligado a ser un nuevo y feliz usuario de Windows Vista Home Premium. Bienvenido a casa, Glaurung (HP dv6420LA, Turionx2, chipset NVidia, 1Gb RAM).

De ese día ya han pasado dos meses. Encargué el repuesto de Beowulf a los Estados Juntos y la reparación salió a mitad de precio, dado que yo mismo instalé la nueva pantalla. Vendí ese notebook por una buena cifra a buen comprador, a quien le presta ahora buenos servicios. Y mientras, he aprendido a apreciar lo bueno y a detestar lo malo de Windows Vista. Me gusta la manera en que presenta los archivos, salvo por el desorden increíble que crea entre carpetas y programas. En general las mejoras gráficas son buenas, los chiches son interesantes y la vista 3D de Aero es impresionante. Sin embargo, estamos hablando de mi máquina de trabajo, donde el desempeño 3D no es lo más importante. Y aún así; haciendo una prueba con Need For Speed Most Wanted, Vista me da menos frames que mi antiguo notebook de hace dos años con un procesador menos.

Dejar a Vista en una configuración de trabajo relativamente decente demanda un montón de tiempo y de googleo; hay que desactivar decenas de servicios inútiles y advertencias que, si conoces el modelo de seguridad de Unix, son entre jocosas y ajenamente vergonzosas. Las transparencias de las ventanas comen recursos como si las memorias fuesen gratis, y una vez que tuve que hacer algo relativamente complejo, tuve que quitar Aero. La copia de archivos es impresentablemente lenta, pudiéndose acelerar un poco si usted sigue consejos oscuros y escondidos en algún foro y que, por supuesto, van contra la filosofía Vista. Los chiches no valen la pena el gasto de recursos que se hace en ellos.

Promocionándose como el sistema operativo más estable de Microsoft, tuve que reiniciarlo desde el botón de power unas dos veces por día. Consideremos que acostumbro a suspender-hibernar-dormir mis pc's por hasta 2 meses seguidos, o dejarlos prendidos por semanas enteras. Para mí, reiniciar un XP es casi impensable, eso no pasa nunca. Con Vista, no estoy seguro si voy a poder terminar la tarea que estoy haciendo.

Es bien sabido que Microsoft pretende, con Vista, obligar a todo el mundo a cambiar de tarro. Partamos por casa: ninguno de mis pendrives, hubs, dongles ni mp4 funcionó en Vista. Adiós entretenimiento en el notebook de la serie de máquinas de entretenimiento de HP. En resúmen, y si bien siempre he dicho y pensado que un pc debe usar el sistema operativo que le corresponde, voy a probar instalándole XP a Glaurung. Porque creo que me fuí a comprar un Ferrari, y me vendieron un Fiat enchulado. Vista, te dí algo así como dos meses más de oportunidades sobre las que merecías, y mientras no seas un sistema operativo maduro, es decir, antes del Service Pack 2, no pienso volver a tocarte, plasta. Nos vemos de nuevo el 2010.

Me da lata pensar que Microsoft se quedó con $90.000 míos sin darme NADA a cambio; me siento estafado, porque no existe una política que te permita elegir tu sistema operativo de manera efectiva.

Etiquetas: Microsoft, Tecnología, Windows Vista, Windows XP